CEUTA, ciudad de ultramar
Partimos desde el Puerto de Tarifa con rumbo a Punta Cires. Éste es el punto más angosto del Estrecho de Gibraltar. Un lugar donde podremos encontrar diferentes especies de cetáceos como delfines comunes, listados o mulares, calderones comunes, cachalotes, rorcuales comunes y más esporádicamente ballenas jorobadas, orcas y calderones grises. Todo dependerá de la época del año en la que estemos. También es posible avistar con frecuencia peces luna y atunes, y alguna vez incluso peces espada o tiburones martillo!
A principios de primavera y otoño es posible también presenciar la migración de aves en el Parque Natural del Estrecho. Sin dudas otro de los grandes atractivos de cruzar en yate el Estrecho de Gibraltar. No es casualidad que sea considerado como uno de los mejores puntos o “spots” del mundo para birdwathching dada la gran cantidad de especies que se pueden observar págalos grandes, pomarinos, alcatraces, pardelas cenicientas y baleares, fumareles, paiños, charranes, alcas, frailecillos, además de aves planeadoras que cruzan el estrecho en sus rutas migratorias entre Europa y África.
Este paso de aves migratorias ocurre dos veces al año. Un paso en primavera en sentido Sur-Norte hacia las zonas de cría y otra en otoño en sentido Norte-Sur tras el periodo de cría.
Nuestra ruta continua de Punta Cires hacia Ceuta pasando por Isla Perejil. Un islote deshabitado situado en el mismo estrecho a unos 200 metros de la costa continental de África y a unos 8 km al noreste del núcleo urbano de la ciudad de Ceuta. Detrás de Isla Perejil encontraremos el Monte Musa, un promontorio de 839 m. de altura, situado al norte de Marruecos junto a la costa del Estrecho. El final de nuestro viaje de ida es la ciudad de Ceuta, donde atracaremos en su puerto deportivo, la Marina de Hércules.
Una vez allí te proponemos:
1.- Hacer una ruta cultural por la ciudad de Ceuta. Ver el conjunto monumental de las Murallas Reales, el Santuario de Nuestra Señora de África o el Monumento a los caídos en la guerra de África. Acercarte a su Catedral erigida en honor de Nuestra Señora de la Asunción, su Palacio de la Asamblea, su Basílica Tardorromana, el Museo de la Legión o sus Baños Árabes.
2.- Pasar un día de relax y baño en el complejo Parque Marítimo del Mediterráneo. 56.000 metros cuadrados de espectaculares lagos azules de agua salada, cascadas y saltos de agua. Tomar el sol en este exclusivo enclave de agua y vegetación rodeado de altas palmeras. Y además disrutar de su variada oferta de restauración. El atardecer aquí es realmente especial.
3.- Disfrutar de la oferta gastronómica de Ceuta. Mercado de abastos y restauración.
Basta echar un vistazo al Mercado Central de Abastos de Ceuta y ver en sus pescaderías su extensa variedad para ver que se puede satisfacer a los más exigentes paladares. Por precio y por calidad merece la pena hacer algunas compras para llevar a casa.
Su cercanía a tierras marroquies y su enclave privilegiado de aguas del Océano Atlántico y Mar Mediterráneo dan a su gastronomía un punto exótico y de mezcla únicos. Pescados y mariscos cocinados de muy diversas formas. Sabores de aquí y de allá con especial mención de sus salazones de bonitos o voladores. Un proceso aún artesanal, secados al sol y junto al mar dándole unas propiedades de sabor únicas. Por último si te apetece ir de tapeo, la zona de Jáudenes e Independencia son una buena opción.